La idea de desmontar una casa en Alabama, transportarla en barco hasta San Andrés y luego volver a ensamblarla para recrearla idénticamente es realmente fascinante. Es un ejemplo impresionante de preservación histórica y reutilización arquitectónica. Este tipo de proyectos no solo conservan la historia y la arquitectura de una estructura, sino que también la hace una locación única que agrega un toque único a la identidad cultural y arquitectónica de la isla de San Andrés.