Históricamente, este lugar era conocido como «Móncora». Desde la época de La Conquista, los españoles concentraban a los indígenas guanes sobrevivientes y adoctrinados en este espacio. En 1605, se estableció allí la Cofradía de la Natividad de la Santísima Virgen María. Con el tiempo, se creó un imponente templo y se nombró a un párroco, para que bautizara 134 indígenas y confirmara 490 personas, entre ellas los caciques de Móncora, Coratá, Chuagüete y Macaregua. Esto creó una importante cultura religiosa en la zona y una identidad entre los indígenas guanes, que aún persiste.